Aeroméxico anunció el martes, 30 de junio, que la empresa y algunas de sus filiales entraron en proceso voluntario de reestructuración financiera bajo el Capítulo 11 en Estados Unidos, no obstante, no dejará de ofrecer servicios a los clientes. Este capítulo es un proceso legal temporal que permite a la junta directiva de la empresa reorganizar la compañía y completar su reestructuración financiera, bajo la supervisión del sistema judicial estadounidense.
A la espera de una reestructuración
Se suma así a una larga lista de empresas turísticas que están optando por este mecanismo para poder reestructurarse y sobrevivir al impacto del Covid-19 como es el caso de Avianca, Virgin Australia, LATAM, Thai Airways, Air Mauritius, la aerolínea regional sueca BRA Braathens Regional o la rent a car Hertz.
Las que desaparecen
Por su parte, otras han tenido menos suerte y han caído, este es el caso de la británica Flybe, cuatro filiales de Norwegian, South African Airways, Germanwings (Grupo Lufthansa), LEVEL Europe (IAG), la turca AtlasGlobal, la filial alemana de SunExpress o la ecuatoriana TAME.
Sun Express, forzada a finalizar sus operaciones en Alemania
El caso de Aeroméxico
“Estamos comprometidos en adoptar las medidas necesarias para operar de manera eficiente en esta nueva realidad y estar mejor preparados para un futuro exitoso después de esta pandemia. Con el proceso del Capítulo 11 esperamos fortalecer nuestra posición financiera e incrementar nuestra liquidez, creando al mismo tiempo una plataforma sustentable que nos permita transitar con éxito la incertidumbre económica global”, explicó Andrés Conesa, Director General de Aeroméxico.
Lo cierto es que la compañía continuará operando, y es que el proceso bajo el Capítulo 11 está diseñado para que las empresas puedan mantener sus operaciones, por lo que todos los billetes, reservas, vouchers electrónicos y Puntos Premier se mantienen. De hecho, durante el mes de julio doblará el número de vuelos con respecto a junio en el mercado interno de México. También cuadriplicará sus conexiones internacionales.
Asimismo, inciden en que no habrá cambios en las relaciones con sus empleados, que seguirán recibiendo su salario y prestaciones. Aeroméxico tiene también la intención de continuar contratando bienes y servicios de sus proveedores y espera mantener los acuerdos comerciales vigentes con varias aerolíneas, incluyendo su alianza estratégica con Delta Air Lines, que de hecho es accionista mayoritaria de la misma.
La flota operativa actual del Grupo Aeroméxico suma 119 aviones Boeing 787 y 737, así como Embraer, 170 y 190 de última generación. Es, además, socio fundador de la alianza de aerolíneas SkyTeam.
