Boeing anunció el pasado miércoles, 3 de julio, que proporcionará una “inversión inicial” de 100 millones de dólares, durante varios años, a las familias y comunidades afectadas por los accidentes aéreos de los B737 MAX en Indonesia y Etiopía, que dejaron 346 muertos.

Según ha informado Travel Weekly, el gigante aeroespacial indicó que parte de esta inversión cubrirá los gastos de subsistencia y las penurias sufridas por las familias de las víctimas. No obstante, no dio muchos más detalles sobre esta ayuda, ni siquiera cuánto dinero iría destinado a cada familia y cómo se les haría llegar. Por el contrario, sí especificó que trabajará con los gobiernos locales y las ONG.

Lo cierto es que el fabricante estadounidense acumula decenas de demandas por estos siniestros. Los familiares de los fallecidos en el accidente de Lion Air han decidido llegar a un acuerdo con Boeing, a través de la mediación. Mientras que los de las víctimas de Ethiopian Airlines han preferido esperar a que se recopile más información sobre el accidente.

Las investigaciones preliminares de ambas catástrofes apuntan a fallas en el sistema de antibloqueo MCAS del avión, cuya implicación fue reconocida posteriormente por Boeing. Como consecuencia, se decidió dejar en tierra la flota de estos aparatos, conformada por unas 400 unidades. Desde entonces, el fabricante trabaja en la actualización de este software, para que el 737 MAX pueda volver a los cielos.

Los abogados que representan a las familias demandantes han asegurado que esta ayuda no les impedirá ahondar en cómo se produjo la producción de los 737 MAX y el desarrollo del sistema MCAS. Además, recriminaron la falta de información por parte del fabricante sobre la distribución y gasto de los 100 millones de dólares.