Boeing ha reconocido públicamente, por primera vez, la implicación del sistema de antibloqueo MCAS de los B737 MAX en los dos accidentes mortales protagonizados por este tipo de aviones en Indonesia y Etiopía.

“Es evidente que en ambos vuelos el sistema MCAS se activó en respuesta a una información errónea del ángulo de ataque”, manifestó el CEO del fabricante estadounidense, Dennis Muilenburg, en un vídeo publicado en Twitter. “Es nuestra responsabilidad eliminar este riesgo, somos los dueños y sabemos cómo hacerlo”, añadió.

Boeing 737 MAX

Boeing 737 MAX

Muilenburg realizó estas declaraciones poco después de que se difundieran los primeros datos de la investigación del accidente de Ethiopian Airlines, que tuvo lugar el pasado 10 de marzo, ocasionando la muerte de 157 personas. Estas pesquisas apuntaron a posibles fallas en el sistema MCAS, al igual que lo hiciera la investigación preliminar de la catástrofe de Indonesia.

El sistema MCAS del aeroplano actúa cuando el ordenador detecta una inclinación del morro del avión muy alta, interpretando que la máquina puede entrar en pérdida. Entonces, reacciona empujando el morro hacia abajo para dar sustento a las alas y estabilizar el aeroplano, pero lo hace de manera tan fuerte, que los comandantes no pueden volver a elevarlo.

“En Boeing lamentamos las vidas perdidas y estamos centrados en la seguridad para asegurar que tragedias como esta no vuelvan a ocurrir”, reparó Muilenburg. "Estamos adoptando un enfoque integral y disciplinado, y tomándonos el tiempo necesario para actualizar correctamente el software", agregó.

A finales del pasado marzo, Boeing presentó los cambios técnicos a implementar en este tipo de avión para solucionar sus problemas de seguridad. Muilenburg, por su parte, participó la semana pasada en un vuelo de prueba, a bordo de un B737 MAX 7, para demostrar la actualización del software MCAS. No obstante, la certificación de dicho cambio, que está a cargo de los reguladores de los diferentes países, podría llevar semanas e incluso meses.

Asimismo, han anunciado una reducción del 20% en la fabricación de estos modelos. A partir de mediados de este mes, el fabricante estadounidense reducirá la producción de aviones, pasando de 52 a 42 al mes, para concentrar los recursos en dar solución a estos problemas de seguridad.