Balcones, furgonetas, barcos etc. todo se convierte en una vivienda turística en destino con tanta demanda como Ibiza. Vecinos de la calle Alacant, en el municipio ibicenco de Sant Antoni, han denunciado el realquiler a turistas de un local comercial que se encuentra en los bajos de un edificio y que se está utilizando como vivienda sin la autorización pertinente. 

Según ha informado Diario de Ibiza, el Ayuntamiento de Sant Antoni comprobó por medio de una inspección que el local se está usando como vivienda, pese a que no dispone de la autorización del cambio de uso, por lo que ha procedido a abrir un expediente de disciplina urbanística. 

El inmueble mantiene en su fachada el aspecto de un establecimiento comercial. Las cristaleras están cubiertas de publicidad, por lo que no se puede ver el interior. En él se hospedan dos turistas argentinos de 25 y 28 años que, según manifestaron, pagan 200 euros por dormir en el lugar durante dos semanas.

Los jóvenes comentaron que encontraron el local por casualidad, al pasar delante de él. Entonces, preguntaron al inquilino si su alquiler estaba disponible. Al parecer, el arrendatario convive con ellos en el establecimiento, en una estancia separada por una cortina. En el local, además, se puede observar una litera y un colchón.

Los vecinos, por su parte, afirmaron que desde el año pasado se alquilan camas en este establecimiento y que, pese a que los turistas no ocasionan molestias, no entienden cómo pueden alquilarles este tipo de local, que carece de ventilación y de condiciones de habitabilidad. Precisamente, este inmueble está cerca de la casa okupada por los desalojados del hostal Picadilly.