La empresa público-privada Aramón ha iniciado las obras para un nuevo telesilla en la estación de esquí de Formigal (Huesca). El proceso de instalación se realizará durante la temporada de verano y está previsto que el nuevo telesquí, que ha sido bautizado como Lanuza, esté finalizado para el invierno.

Se trata de un telesilla cuatriplaza con salida en el valle de Izas, a 1.986 metros, y con llegada al collado de Pico Royo, que se encuentra a 2.268 metros de altitud. Se suma a otro, de seis plazas, que se construyó el año pasado, pero que no ha podido estrenarse debido a que las estaciones aragonesas no abrieron el pasado invierno a causa del Covid-19. Entre ambas instalaciones el Grupo Aramón ha realizado una inversión que supera los 20 millones de euros.



Según ha explicado Antonio Gericó, director general de Aramón, este nuevo telesilla "conseguirá descongestionar uno de los cuellos de botella que había en Formigal". Tal y como ha señalado al diario Heraldo, la próxima temporada será recibida con ganas, tanto por parte de las estaciones como por parte de los visitantes, ya que el invierno pasado “los amantes del esquí no pudieron disfrutar de su deporte favorito y lo que ofrece la naturaleza”.

El grupo Aramón (montañas de Aragón) está participado al 50% por el Gobierno de Aragón e Ibercaja y, bajo la forma de sociedad anónima, actúa como un holding que gestiona e integra cuatro estaciones de esquí: Cerler y Formigal-Panticosa, en los Pirineos; y Javalambre y Valdelinares, en el Sistema Ibérico.