La tirolina de Fuentespalda (Teruel), declarada como la más grande de Europa, ha cerrado por la repentina declaración de concurso de acreedores de la empresa concesionaria del servicio y ha dejado tirados sin previo aviso a decenas de clientes que habían contratado la experiencia.

La enorme tirolina de dos kilómetros ha echado el cierre por los problemas económicos de la empresa Alquifuentespalda, que obtuvo la concesión del servicio impulsado por el consistorio turolense en 2019. El problema es que la entidad no ha realizado ningún comunicado oficial de la situación, por lo que al menos 47 reservas han visto como se truncaban sus planes de disfrutar de las espectaculares vistas de la atracción, en la que se llegan a alcanzar los 120 km/h. 

“Quería tirarme en la tirolina más larga de España y tenía reservados 4 días para eso. Si tienen que cerrar, al menos que avisen a la gente y la traten con respeto. No puede ser que todo el mundo se lave las manos”, ha criticado en declaraciones a Heraldo de Aragón Paqui Rodríguez, una periodista tinerfeña que había pagado 67 euros por el servicio.