Los influencers pueden ser vistos como aliados o como enemigos del sector turístico. Si bien se han convertido en un elemento importante de promoción en los canales digitales y en una buena forma de llegar al público más joven, su actitud ha llevado a empresarios hoteleros y hosteleros incluso a vetarlos.

Los últimos International Influencers Awards, celebrados en la isla de Ibiza del 3 al 6 de junio, han alimentado aún más el debate sobre hasta qué punto estas figuras marcan la opinión pública. Mediante el evento no solo se pretendía premiar a los famosos en las redes sociales que generan un "impacto positivo en la sociedad", sino que también se propuso la recaudación de fondos para la asociación Ibiza Preservation.

Sin embargo, según recoge El Mundo, pese a que estos influencers, que acudieron al evento con todos los gastos pagados, acumulaban 156 millones de seguidores en Instagram y más de 144 en Tik Tok, apenas lograron recaudar 5 euros. Después de que una cuenta de Instagram —"Hazme una foto así"— y los medios de comunicación criticaron la situación, las donaciones se elevaron hasta los 1.200 euros; no obstante, quedó muy lejos de lo que se pensaba recaudar.

Los galardones estaban enfocados a los perfiles de TravelWellness, Fitness, Fashion, Beauty, Lifestyle, Tik Tok, Revelation, Music y Best in the World.