Lisboa (Portugal) quiere arrebatarle a Barcelona uno de sus principales eventos, el Mobile World Congress (MWC), la feria referente en el mercado mundial de telefonía móvil que el pasado año registró 100.000 asistentes.

Según informa el diario portugués Expresso, el objetivo de la capital lusa es convertirse en la sede de este evento a partir de 2023, fecha en la que finaliza el acuerdo entre la empresa organizadora (GSMA) y Barcelona.

Tanto el gobierno luso como el Ayuntamiento de Lisboa están en contacto con los organizadores para convencerles sobre la idoneidad de que la ciudad lisboeta se convierta en sede. Entre sus bazas se encuentran la ampliación programada de la Feria Internacional de Lisboa que le permitirá acoger a más de 100.000 visitantes.

No sería la primera vez que la capital lusa le “roba” un evento de estas características a otra gran ciudad europea. Y es que desde 2016 la urbe lisboeta organiza la Web Summit que desde su primera convocatoria (2009) había tenido lugar en Dublín (Irlanda). De hecho, la pasada semana se llegó a un acuerdo por el que Lisboa se garantiza la celebración de esta cita hasta 2028 pagando 11 millones de euros anuales. En su edición de 2017 congregó a 60.000 asistentes y generó un retorno económico de 300 millones de euros.

Por su parte, Barcelona ve de nuevo en peligro su posición como sede y es que durante principios de 2018 GSMA amenazó con llevarse la feria a Dubái. Finalmente y tras duras negociaciones, la ciudad condal se garantizó celebrar el MWC hasta 2023. Su edición de 2019 tendrá lugar del 25 al 28 de febrero en los recintos de Fira de Barcelona.