La presidenta del Govern de Balears, Francina Armengol, ha negado que esté en riesgo la instauración del porcentaje mínimo de consumo de producto local que tendrán que asumir los establecimientos hoteleros, a pesar de que el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo declaró esta medida como "inconstitucional". Armengol se mostró tranquila sobre la aprobación de la nueva Ley de Turismo balear en la que se incluye la polémica normativa, mientras que otros grupos políticos del Parlamento balear creen que el Gobierno de España impondrá un recurso que paralizará la entrada en vigor de la popularmente conocida como 'Ley Negueruela'.

La Ley de Turismo balear, establecería un compromiso de consumo de productos de alimentación y bebidas de proximidad, garantizando un mínimo situado entre el 3 % y el 5% dependiendo de la clasificación de cada hotel. Además de estos porcentajes obligatorios, los negocios turísticos con un mínimo de un 10 % de producto local tendrán una promoción prioritaria por parte del Ejecutivo balear por contribuir al turismo sostenible. Justamente este régimen especial —que para el Ministerio de Turismo vulneraría "el principio de igualdad y no discriminación de los operadores económicos"— sería el único punto que esté a debate, según Armengol, ya que el Ministerio estaría completamente de acuerdo con el mínimo exigido. 

Tal y como cuenta el medio La Vanguardia, esta semana el portavoz del partido regional 'Proposta per les Illes—El Pi', Josep Melià, se dirigió en sesión parlamentaria a Armengol para advertirla de que el Gobierno "está amenazando" con presentar un recurso de inconstitucionalidad ante esta fijación de un porcentaje mínimo, y ha pedido al Ejecutivo autonómico "que no dé su brazo a torcer".

Ley de Turismo balear
 

Además de las dos medidas mencionadas, la nueva Ley de Turismo balear implanta una serie de normativas que afectarán sustancialmente a los hoteles de la Comunidad Autónoma:

  • En el ámbito de la alimentación se prohibirá la utilización de especies amenazadas y se establecerá como obligatoria la trazabilidad del pescado y del marisco de origen balear.
  • En cuanto a la energía, se obligará a los establecimientos turísticos a cambiar las calderas 'fuel oil' por otras de gas natural o eléctricas.
  • En lo que respecta a agua, se obligará a los hoteles a instalar sistemas de doble pulsador en las cisternas de los WC, dispositivos de ahorro de agua en grifos de lavabos, bañeras y duchas. El aprovechamiento de las aguas fluviales será un factor que se tendrá en cuenta en la clasificación del establecimiento. También estarán obligados a medir el consumo de agua.
  • En cuestión de residuos, se prohíbe el uso de amenities de un solo uso, se obliga a sustituir folletos de papel por códigos QR. Los establecimientos turísticos también están obligados a medir la cantidad de residuos generada y controlar las temperaturas de los edificios de forma integral.
  • Desde el año 2023, los hoteles de las islas deberán instalar camas elevables (mecánicas o eléctricas) para facilitar el trabajo de las camareras de piso.