España es popularmente conocida por sus bares. De hecho el sector hostelero del país está formado por más de 300.000 establecimientos, que emplean a 1,7 millones de personas, y representan el 6,2% del Producto Interior Bruto (PIB). Sin embargo, esto podría cambiar por la crisis del coronavirus

Según reseña La Información, el secretario general de Hostelería de España, Emilio Gallego, reconoció que el "sector está devastado". "Los cálculos apuntan a que el 15% de los establecimientos (alrededor de 45.000) ya no abrirán más al público cuando se acabe el confinamiento", agregó. 

El plan de desescalada anunciado por el Gobierno, contempla la apertura de las terrazas de los restaurantes, bares y cafeterías, con una limitación del aforo del 30%, en la 'Fase 1', que entrará en vigor el 11 de mayo, siempre y cuando los territorios cumplan con los requisitos sanitarios. Para la 'Fase 2' (prevista para finales mayo), estos establecimientos podrán ofrecer servicios en su interior, estando limitado el aforo en un tercio de su capacidad. 

Precisamente, Jesús Lozano, propietario de Fígaro café, ubicado en Madrid cerca del Teatro Real, expuso al diario citado: "Si me limitan mucho el aforo, ¿de qué voy a vivir yo?". En este sentido, recriminó que, pese a que "el casero se está portando muy bien, habrá que pagar el alquiler", además de que sigue abonando la cuota de autónomo y no ha percibido ingresos desde hace mes y medio. A todo esto, se suman las condiciones de reapertura: "Cuando abramos tendré que eliminar los boles de frutos secos y patatas fritas por botes de gel hidroalcohólico y servir las cervezas con mascarilla y guantes".

Del informe Impacto de Covid-19 en la Hostelería en España, elaborado por la consultora Bain & Company y la firma de servicios profesionales EY, se desprende que la pandemia podría dejar un agujero de 55.000 millones de euros (40%) en el sector hostelero, este año. 

"Mientras no haya una vacuna, no volveremos a ser lo que éramos. Seremos distintos. Tras este tsunami, esta guerra, la hostelería en España, los bares, seremos diferentes. Pero en nuestra cultura mediterránea seguirán siendo importantes porque necesitaremos seguir celebrando la vida", reflexionó Gallego.