El Gobierno británico ha llegado a un acuerdo con los accionistas de la aerolínea regional Flybe para salvarla del colapso. Recientemente, se hicieron públicos los problemas financieros de la compañía, que hace tan solo un año fue rescatada con 117 millones de euros por el consorcio formado por Virgin Atlantic, Stobart Air y Cyrus Capital.

Según ha informado TravelMole, aunque los términos del acuerdo no han sido revelados al detalle, se presume que la aerolínea contará con un plazo de tres meses para hacer frente a su deuda. Lo que sí se sabe con seguridad es que el consorcio mencionado realizará una inyección de capital y que el Gobierno revisará los impuestos que paga Flybe para poder operar (que ascienden a 224 millones de euros al año, según el diario El Confidencial). Tampoco se descarta la concesión de un préstamo por parte del Ejecutivo.

A este respecto, el secretario general de la Asociación de Pilotos de Aerolíneas Británicas, Brian Strutton, manifestó: "Esta es una buena noticia para los 2.400 empleados de Flybe, cuyos puestos de trabajo están asegurados, y para las comunidades regionales que habrían perdido su conectividad aérea sin Flybe".

Polémica

El rescate de Flybe no ha estado exento de polémica. Los defensores del medioambiente, por ejemplo, no son partidarios de revisar los impuestos que pagan las aerolíneas. También ha sorprendido la diferente vara de medir que ha aplicado el Gobierno para esta crisis y para la del gigante turístico Thomas Cook, al que negó los 200 millones que necesitaba para seguir operando.

El exconsejero delegado del holding IAG, que engloba a Iberia y Vueling, Willie Walsh, también ha afeado el rescate de Flybe por parte del Gobierno, lo que ha definido como un "descarado mal uso de los fondos públicos". En una carta emitida al secretario de Transporte, Grant Shapps, insistió en que los contribuyentes británicos estaban pagando la "mala gestión" de la compañía.

Cabe destacar que Flybe es una importante aerolínea en Reino Unido, ya que opera la mayoría de conexiones nacionales fuera de Londres y vuela hasta 56 aeropuertos europeos.