Solo una semana después de que Manuel Vidal, director de comunicación de Naviera Armas - Trasmediterránea, negara que la compañía estuviera al borde de la quiebra y calificara que se trataba de “una fake news” para hacer daño, la compañía ha pedido fondos al Estado para poder salvarse.

Tal y como informa Cinco Días, la naviera ha solicitado una inyección de fondos al Fondo de Apoyo a la Solvencia de Empresas Estratégicas, gestionado por la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI) y dotado con un total de 10.000 millones de euros —de los que Air Europa ya ha recibido 475—. Fuentes citadas por el medio recalcan que la cantidad solicitada por la naviera supera los 100 millones.

Los recursos se aportan a través de préstamos convencionales o participativos que deben ser devueltos en un plazo máximo de seis años. Será el consejo gestor del fondo, conformado por la SEPI y los ministerios involucrados, quien evalúe la petición y quien defina las condiciones.

La pasada semana Armas-Transmediterránea confirmó que se encuentra negociando con sus acreedores para refinanciar los bonos (deuda) por valor de más de 580 mill. de euros que vencen en 2023 y 2024. No obstante, garantizó todos sus compromisos con sus proveedores comerciales y la prestación de todos los servicios tanto en la Península como en los archipiélagos y en el Estrecho.

La naviera, nacida de la fusión entre Armas (Las Palmas de Gran Canaria, 1941) y Trasmediterránea (Barcelona, 1916), es la más importante de España transporta más de 5 millones de pasajeros anuales, tiene una flota de 40 buques que conectan los principales puertos de cuatro países y opera más de 100 conexiones de pasaje y carga en las rutas de Baleares, Canarias, Melilla, Ceuta, Marruecos y Argelia. Es clave para garantizar la conectividad con la Península desde los dos archipiélagos y las dos ciudades autónomas.