American Airlines prohibió el acceso al avión, que conectaba la ciudad de Dallas (Texas) con Kansas City (Misuri), a una familia de siete miembros, después de que uno de sus hijos, de cinco años y con autismo, sufriera una crisis antes de embarcar.
Según ha informado El País, Heather Halkuff, madre del pequeño, explicó que una de las empleadas de la compañía le espetó que el niño no podía subir a la aeronave porque podría molestar a otros pasajeros y si padecía otra crisis durante el vuelo tendrían que regresar al aeropuerto.
Todo ello pese a que la familia Halkuff, que tiene dos hijos con autismo, uno de ellos es Milo, de cinco años, y la otra Ollie, de dos, se informó sobre el programa de la aerolínea para familiarizar a los niños con los aviones. Incluso, Milo y Ollie participaron en la sesión sobre el embarque y seguridad en el avión justo una semana antes del viaje.
Los pasajeros, por el contrario, se mostraron comprensivos y solidarios ante la situación. Heather comentó al respecto que los viajeros les ofrecieron ayuda, antes de que la empleada les impidiera volar. La compañía aérea, por su parte, emitió un comunicado en el que se mostró preocupado por lo ocurrido y aseguró que se encuentra investigando el caso.
