Dos parejas han sido absueltas en sendos juicios celebrados en Swindon, Inglaterra, tras ser denunciados por sacar a sus hijos durante varios días de sus clases. La primera pareja se había llevado a su hijo de vacaciones durante cinco días en octubre, con lo que su asistencia final a clases había sido de un 92,96% durante el curso, un 86,84% si el cálculo se hace sobre la primera mitad del mismo. El hijo de la segunda pareja no acudió al colegio durante cinco días en el mes de septiembre, siendo la asistencia del niño de un 92,14% a lo largo del año. El departamento de educación considera que un absentismo escolar grave se produce cuando un alumno se pierde al menos el 10% de las horas lectivas. El juez, no obstante, consideró que ese porcentaje debe hacerse sobre el curso completo, y no sobre un periodo de tiempo más corto. Estas sentencias abren las puertas a otras familias británicas que decidan viajar con sus hijos en épocas diferentes a las de las vacaciones escolares