Dada la grave situación operativa en la que se encuentra sumido el Aeropuerto de Londres-Heathrow (Reino Unido), debido a la escasez de personal y a la amenaza de diferentes huelgas, empiezan a aparecer en escena otros aeródromos británicos menos frecuentados por las aerolíneas para ofrecer sus servicios.

Es el caso del Aeropuerto de Londres Southend, que se está ofreciendo para ayudar a las aerolíneas a mantener su programación de vuelos para este verano, afectada en la mayoría de los casos por la limitación de 100.000 pasajeros diarios impuesta por la dirección de Heathrow.

Tal y como informa el medio británico TravelMole, el enésimo aeropuerto londinense ofrece una alternativa “más relajada y libre de estrés” para aerolíneas y pasajeros. Actualmente, el recinto solo opera dos vuelos diarios, por lo que tiene un amplio margen para atraer nuevos vuelos a sus instalaciones, ubicadas a 72 kilómetros al este del Reino Unido. 

Hasta el año 2019 pasaban por Londres Southend en torno a dos millones de pasajeros al año, pero, tras la pandemia, las aerolíneas han preferido consolidar sus programaciones en otros recintos aeroportuarios de superiores dimensiones.