La Casa Blanca y el Senado han acordado un paquete de estímulo económico de 2 billones de euros, para minimizar el impacto de la crisis del coronavirus. Se trata del mayor plan de este tipo de la historia moderna de Estados Unidos. 

Lo cierto, tal y como reseña El Confidencial, es que la enfermedad está teniendo una especial incidencia en el país donde, hasta la mañana de ayer, se registraron 775 muertes y 54.000 contagios. 

De acuerdo al diario citado, pese a que aún no se conocen los detalles del plan, que aún debe ser aprobado por el Congreso, se sabe que incluye pagos directos y beneficios a los desempleados. También, ayudas a los estados y a las empresas afectadas por la pandemia. 

La prensa estadounidense, no obstante, ha adelantado que alrededor de 250.000 millones se destinarán a pagos directos a individuos y familias, mientras que otros 250.000 millones al desempleo. A su vez, 350.000 millones irán dirigidos a préstamos para pequeñas empresas y 500.000 mill. a compañías con dificultades. 

A este respecto, el principal asesor económico de Donald Trump, Larry Kudlow, manifestó: "Esta legislación se necesita con urgencia para impulsar la economía, proporcionar inyecciones de efectivo y liquidez y estabilizar los mercados financieros para ayudarnos a atravesar un período difícil y desafiante en la economía que enfrentamos en este momento".