La comisaria europea de Interior, Ylva Johansson, ha reconocido, en un debate en el Pleno de la Eurocámara, que “la situación (migratoria) en Canarias es gravísima”. Johansson destacó que en 2020 se produjo un incremento en la llegada de migrantes de casi un 1.000%, por lo que “la Comisión está dando ayuda adicional y también hay presente personal de Frontex” (agencia europea encargada de la gestión de fronteras y costas).
Johansson realizó estas declaraciones después de que varios eurodiputados españoles, con especial ahínco de los canarios Juan Fernando López Aguilar Gabriel Mato, solicitaran a la UE mayor implicación y más activa para tratar de resolver la situación. Mato denunció que Canarias “está desbordada y sola”, situación que está produciendo un incremento de la crispación y la tensión en la sociedad migrante y la local, lo que podría pasar factura a la industria turística de la zona.
España también se compromete
Además de esta promesa de colaboración de la UE, Canarias obtuvo el pasado martes el compromiso por parte de la Delegación del Gobierno de más presencia policial en los municipios (eminentemente turísticos) afectados por los actos violentos que han protagonizado algunos inmigrantes durante las últimas semanas. Tal y como informa La Provincia, Maspalomas/San Bartolomé de Tirajana (Gran Canaria) recibirá 40 agentes de Policía Nacional y los 21 guardias civiles del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) —que tienen sede originalmente en Los Rodeos (Tenerife)— permanecerán en Mogán (Gran Canaria).
En este sentido, el delegado del Gobierno en Canarias, Anselmo Pestana, se comprometió también a articular mecanismos para acelerar la expulsión de los migrantes que demuestren actitudes conflictivas y violentas. En primer lugar, estas personas serían expulsadas de los establecimientos turísticos donde se encuentran alojados actualmente y derivadas a un Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE), para su posterior deportación, según detalló Pestana.
