1.500 personas se manifestaron el pasado domingo, 20 de enero, en las proximidades del muelle de Corralejo (Fuerteventura), en contra del nuevo sistema de control de acceso al islote de Lobos (ubicado en el noroeste de esta isla canaria), que entró en vigor el pasado 15 de enero. La huelga ha sido convocada por la plataforma ‘Todos con Lobos. Lobos para todos’, conformada por colectivos sociales y empresariales del norte de la ínsula.
Este sistema, impulsado por el Cabildo de Fuerteventura, contempla la solicitud online de una autorización previa para poder visitar Lobos, con el fin de cumplir con la capacidad actual de acogida del islote: 200 visitantes de forma simultánea, fijada por el Plan Rector de Uso y Gestión (PRUG) del islote de Lobos, que se aprobó en 2006. El objetivo es conservar el estado natural de este espacio. No obstante, no siempre se ha cumplido con esta cifra y es que, además de las tres embarcaciones autorizadas para el transporte de turistas, al islote llegan más visitantes a bordo de los denominados watertaxis y de los ‘party boats’, llegándose a contabilizar hasta 1.400 personas diarias.
A tenor de la medida del Cabildo, según ha informado Diario de Fuerteventura, diferentes colectivos sociales y empresariales del norte de Fuerteventura han creado la citada plataforma ‘Todos con Lobos. Lobos para todos’, con el fin de defender el acceso tradicional al islote y llamar al gobierno insular a negociar y buscar una solución consensuada. Bajo este marco, convocó la huelga del pasado domingo, que fue secundada por vecinos de la isla, touroperadores, guías turísticos, la Cámara de Comercio o la Asociación de Turismo de Fuerteventura (Asofuer).
Los vecinos de Fuerteventura temen, principalmente, las posibles consecuencias sociales y económicas de esta medida. Mientras, el portavoz de ‘Todos con Lobos’, Tinín Martínez, consideró que el “uso tradicional y turístico” del islote es compatible con su protección medioambiental.
Aumento de la capacidad
Pese a que esta medida busca cumplir con la capacidad de acogida actual del islote (200 visitantes simultáneos), el Cabildo de Fuerteventura está estudiando modificar lacifra, a través del PRUG. En concreto, se barajan tres opciones: mantener la capacidad de acogida de Lobos en 200 visitantes o aumentarla a 704 o 1.309 personas, siendo la opción de 704 turistas la más viable, debido a que “garantiza el correcto acceso y uso público del parque natural de manera que no comprometa el estado favorable de su medio ambiente actual y futuro”, según matizó la propia institución.
