La compra de Air Europa (Globalia) por parte de IAG (matriz de Iberia y British Airways, entre otras) va camino de convertirse en una nueva ‘historia interminable’. Tras más de medio año desde que se produjera el anuncio de acuerdo definitivo para formalizar la operación de compraventa entre ambas compañías, la transacción sigue atascada en el seno de la Unión Europea y no tiene visos de resolverse, al menos, hasta finales de 2024.

Fuentes próximas a la operación han asegurado a El Confidencial que IAG aún no ha podido enviar el informe de la integración de ambas entidades y de la cesión de rutas que estaría dispuesta a conceder a sus rivales. Las altas exigencias de documentación a las que está siendo sometido el conglomerado aéreo hispano-británico por parte de la Dirección General de Competencia de la Comisión Europea están dilatando aún más si cabe este largo proceso, que tuvo su punto de partida hace ya casi cuatro años.

La pugna Vestager-Calviño, clave


Según apunta el mismo medio, la competencia entre la actual vicepresidenta ejecutiva de la Comisión y comisaria europea de Competencia, la danesa Margrethe Vestager, y la ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital del Gobierno de España, Nadia Calviño, ha contribuido al enquistamiento de la fusión Iberia-Air Europa. Y es que ambas políticas han presentado sendas candidaturas para presidir el Banco Europeo de Inversiones (BEI).