Duro el golpe recibido por la ‘low cost’ Spirit Airlines en este martes, después de que un juez federal haya decidido bloquear la operación de compra por parte de su rival, JetBlue.

Según explica NBC, el tribunal se ha decantado del lado del Departamento de Justicia de Estados Unidos, que presentó una demanda para detener la fusión valorada en 3.800 millones de dólares. Desde la agencia gubernamental alegaban que la unión de ambas compañías se traduciría en un aumento de las tarifas para algunos de los consumidores más sensibles a los precios.

Esta visión ha sido compartida por el juez William Young, que en su dictamen ha indicado que “JetBlue planea adaptar los aviones de Spirit a su diseño y cobrar tarifas medias más altas”.

Desplome en Bolsa


Las primeras consecuencias no se han hecho esperar, y es que la bajo coste con sede en Miami se está desplomando en la Bolsa de Nueva York. En lo que va de jornada, sus acciones han caído más de un 52%.

El acuerdo de compra frustrado, por el momento, daría como resultado una compañía con 458 aviones que operaría unos 1.700 vuelos diarios a más de 125 destinos en 30 países. Asimismo, permitiría a JetBlue incrementar su peso en el mercado aéreo americano, ganando más operativa hacia el Caribe.