Turquía ha acabado cediendo a la presión de Estados Unidosdejará de reabastecer a los aviones rusos en su territorio. No obstante, se trata de una concesión parcial, ya que mantendrá sus conexiones aéreas con el país exsoviétivo, su principal mercado emisor de turistas.

Según ha informado el Ministerio de Aduanas y Comercio del país otomano, queda prohibido el suministro de combustible y las labores de mantenimiento a cualquier aeronave que opere desde o hacia Rusia que posea un 25% de piezas de origen estadounidense —las producidas por Boeing, pero también las de Airbus equipadas con motores norteamericanos—.

De esta manera, las compañías afectadas por esta nueva medida de presión hacia el Estado ruso por la invasión de Ucrania son Aeroflot, Azur Air, Pegas Fly, Rossiya, S7 Airlines, Utair y Yamal. Además, la aerolínea bielorrusa Belavia y la iraní Mahan también tendrán vetado el reabastecimiento en Turquía, según indica FVW.

Advertencia de Estados Unidos


Este anuncio del Gobierno turco llega unos meses después de que la subsecretaria de Comercio de Estados Unidos, Thea Rozman, advirtiera durante una visita al país otomano que aquellos que brindan servicios como el abastecimiento de combustible o de repuestos a aviones estadounidenses que vuelan hacia o desde Rusia y Bielorrusia se enfrentarían a penas de cárcel, multas y a perder los derechos de exportación.

Cabe recordar que entre las sanciones y restricciones que Estados Unidos y la Unión Europea han impuesto a Rusia destacan el cierre del espacio aéreo a las aerolíneas rusas y la prohibición de arrendar o vender aeronaves, motores y repuestos a compañías rusas. Dichas sanciones se hicieron efectivas en marzo de 2022 y siguen vigentes, aunque Turquía no se sumó a las mismas.