El Ayuntamiento de Barcelona ha aprobado una moratoria para congelar la creación y ampliación de pisos turísticos. En concreto, el consistorio no admitirá las comunicaciones previas de inicio de actividades para la instalación y ampliación del uso de viviendas de uso turístico (HUT) en toda la ciudad.

Según informa El Economista, la alcaldesa Ada Colau ha explicado que quieren “evitar la posible incidencia en la regulación de pisos turísticos que pueda tener el nuevo Decreto de Reglamento de Turismo, que la Generalitat aprobará próximamente”. Esta nueva normativa autonómica contempla el alquiler “habitaciones vacacionales”, una práctica sobre la que recientemente el Tribunal Supremo dictó sentencia a favor.

Medida preventiva

"La creación de la nueva tipología de alquiler de habitaciones es una oportunidad de reflexión para evaluar la incidencia que pueda tener en la regulación de pisos turísticos y evitar los efectos negativos", señala el consistorio en un comunicado.

Desde el ayuntamiento barcelonés defienden que esta moratoria es una medida “preventiva” para garantizar que no aumente el número de pisos legales, que actualmente es de 9.591.

De hecho, la Ciudad Condal ha luchado con el fin de erradicar la oferta ilegal, cerrando un total de 4.900 pisos desde 2016.

Janet Sanz, teniente de alcalde de Urbanismo de Barcelona, ha criticado que la Generalitat Catalana “quiere legalizar una actividad que ahora mismo es alegal” y que para ello no se ha consensuado con los municipios insistiendo en la necesidad de que se respeten las competencias urbanísticas que, desde su punto de vista, deben concentrarse en el Ayuntamiento: “No queremos una normativa que no dé estas competencias".