Cada vez más ciudades se suman a las medidas restrictivas para luchar contra el turismo de masas, como es el caso de grandes capitales turísticas europeas como Ámsterdam (Países Bajos) o Venecia (Italia). Ahora, otra ciudad italiana como Milán está ultimando un paquete de medidas para restringir el exceso de flujos turísticos en sus calles, sobre todo de noche, y para ello ha optado por prohibir la venta de los productos alimentarios más consumidos por los visitantes.

Según informa Condé Nast Traveler, la capital de la moda va a prohibir la venta de pizza y gelato después de las 00:30 horas, es decir, después de la medianoche. La propuesta de la Concejalía de Seguridad Ciudadana y Protección Civil contempla mantener esta prohibición durante toda la temporada alta en la ciudad. De aprobarse, quedaría prohibido no solo vender pizza y helado, sino también servir cualquier tipo de comida o bebida en espacios exteriores entre las 00:30 y las 6:00 entre semana y entre la 1:30 y las 6:00 en fin de semana.
 

 Buscamos un equilibrio entre la socialización y el entretenimiento y la tranquilidad y la salud de los residentes”


La medida persigue reducir el ruido en las calles durante la madrugada, muchas veces provocado por las personas que van en busca de este tipo de reclamos gastronómicos y por los locales de ocio. “Buscamos un equilibrio entre la socialización y el entretenimiento, y la tranquilidad y la salud de los residentes, y todo ello respetando la actividad económica de empresarios y emprendedores”, ha manifestado el concejal Marco Granelli.