Egipto anunció recientemente que los turistas debían presentar una prueba PCR negativa, de no más de 72 horas de antigüedad, para poder entrar en el país. La medida no tuvo una buena acogida por parte del sector turístico egipcio, que la tildó de "apuñalamiento". Ahora, el país de los faraones ha modificado esta restricción para no 'espantar' a los visitantes. 

En concreto, tal y como informa fvw, los turistas podrán realizarse la prueba en el aeropuerto de destino, es decir, a su llegada a Egipto, por unos 26 euros. Asimismo, deberán esperar por el resultado en el alojamiento en el que hayan reservado sus vacaciones. De ser positivo, el estado asumirá los costes de la prolongación de la estancia, ya que la persona en cuestión deberá cumplir cuarentena, así como del tratamiento médico. 

Pese a ello, el país del Nilo no puede esperar una gran afluencia de turistas alemanes, por ejemplo, ya que el Gobierno federal de Alemania mantiene su advertencia que recomienda no viajar a Egipto. No obstante, el destino confía en seguir los pasos de Turquía y que el ejecutivo germano levante estas restricciones, al menos, para los principales destinos turísticos.