En un momento en que el cambio climático —con episodios meteorológicos extremos como inundaciones y sequías— está afectando directamente sobre la disponibilidad de recursos hídricos en muchos destinos, cobra mayor importancia la celebración del Día Mundial del Agua. Esta conmemoración impulsada por Naciones Unidas tiene lugar cada 22 de marzo y este año tiene como lema ‘Agua para la paz’.

Este año se hace hincapié en el papel del agua como elemento fundamental en la estabilidad y el progreso de las sociedades y como es necesaria la cooperación entre países a la hora de garantizar el acceso al agua y saneamiento universal para todas las personas. Algo que cada vez va a ser más desafiante si se tiene en cuenta que la ONU prevé un incremento de las necesidades de recursos hídricos de entre el 20% y el 30% hasta 2050.

España no es ajena a este reto, puesto que es uno de los países a los que más severamente afecta el cambio climático. Desde Canaragua, empresa perteneciente al grupo Agbar (Veolia) que gestiona todos los procesos del ciclo integral del agua en Canarias, explican que destinos como el archipiélago, en el que el déficit hídrico se acerca al 35% y se producen fuertes aumentos de demanda en épocas de mayor afluencia turística, promover una gestión sostenible de los recursos hídricos en el archipiélago es fundamental.

La importancia de dar nueva vida al agua, también en el turismo


Desde la empresa inciden en la necesidad de impulsar la regeneración; es decir, el tratamiento avanzado del agua residual, ya sea para devolverla a la naturaleza o para reutilizarla en la agricultura, el riego de zonas verdes, la limpieza de calles en las ciudades o para las industrias, incluida el turismo. De hecho, debido al importante peso de la actividad turística en el PIB canario, desde Canaragua se han volcado en la reutilización de agua aplicada al sector, mediante nuevos usos como el riego de zonas verdes y de campos de golf.

Dinapsis Canarias

Centro Dinapsis Canarias

Por ejemplo, la depuradora de Las Burras, situada en el sur de la isla de Gran Canaria, suministra agua regenerada a tres campos de golf que ocupan una superficie de 2 km², consumiendo aproximadamente 1.700.000 m³ de agua regenerada al año. En total, Canaragua, que opera 10 estaciones depuradoras, consigue producir más de 4.000.000 m³ de agua regenerada al año, para otros usos como el riego de zonas verdes municipales.

Además de la regeneración, desde la empresa inciden en la importancia de la digitalización. Ponen de ejemplo su red Dinapsis, que tiene dos centros de operaciones en las islas de Gran Canaria y Tenerife. Estos centros implementan soluciones digitales de referencia para la gestión del agua, con especial foco en el agua desalada, y el impulso del turismo sostenible en el archipiélago.