Muchos son los destinos que han implantado una tasa turística como modo de mejorar sus ingresos y de invertir en nuevas infraestructuras y proyectos del sector. Tal y como mostraba un estudio del portal web Kayak, son ya numerosas las ciudades y regiones europeas que lo han implantado.

En España, esta tasa sólo se aplica en Cataluña y Baleares (dos de las que mayor número de turistas reciben), mientras que Canarias (la otra región que completa el top 3 de destinos españoles con mayor flujo turístico) se ha planteado en varias ocasiones su implantación.

Más allá de valorar los pros y contras de este gravamen, en este artículo queremos exponer de forma esquemática el funcionamiento de esta imposición en Baleares y Cataluña y, por otra parte, extrapolar esos datos a una posible implantación en el archipiélago canario.

En primer lugar, resulta muy interesante comparar los principales parámetros turísticos que tienen incidencia en la capacidad recaudatoria de la ecotasa:  las pernoctaciones y  el número de cruceristas. Esta distribución se debe a que no todos los tipos de pernoctaciones sufren el mismo gravamen:

Comparativa Baleares, Canarias y Cataluña

Datos provisionales correspondientes a 2016 (INE y Puertos del Estado)

Posteriormente, analizaremos los diferentes modelos de imposición turística aplicados en España:

Cataluña

La ecotasa en Cataluña

Baleares

La ecotasa en Baleares

¿Y en Canarias?

El pasado febrero, el Parlamento de Canarias rechazó la proposición de Ley para la creación de un Impuesto sobre Estancias en Establecimientos Turísticos presentada por el grupo mixto. El órgano de gobierno se negó a su aplicación aludiendo que no quieren convertirse en un “destino antipático” que pierda turistas.

La propuesta que se planteaba, muy similar a la vigente en Lisboa (Portugal), proponía un impuesto de 1 euro por persona y noche para los hoteles de cuatro estrellas, 1,50 para los de cinco y 0,50 para el resto de establecimientos (hoteles de 1,2 y 3 estrellas y apartamentos turísticos). A su vez, contemplaba una exención sobre los campings y albergues y sobre los menores de 14 años.

Haciendo un ejercicio de extrapolación y teniendo en cuenta que son cifras totalmente hipotéticas (en las que no se han tenido en cuenta las exenciones), hemos creado una tabla comparativa en la que valoramos cuánto podría percibir la comunidad autónoma de Canarias en concepto de tasa turística aplicando su modelo, el balear y el catalán:

Extrapolación Canarias

Datos de 2016 (Instituto Canario de Estadística)

Vistos los tres posibles escenarios recaudatorios en Canarias, que por un lado contrastan con los 43,5 millones de euros ingresados por Cataluña en 2015, y que van más en consonancia con los recopilados por Baleares en 2016 (40,2 millones de euros entre junio y diciembre), se puede aseverar que el modelo canario (siguiendo el de Lisboa) es el que menor impacto tendría en el bolsillo de los turistas y que la aplicación en Canarias del modelo balear supondría con diferencia el de mayores ingresos.

Una vez hecho este ejercicio de imaginación, dejamos a los lectores y a las autoridades pertinentes reflexionar sobre cuál es el paradigma más conveniente para aplicar en su comunidad autónoma.