Miles de personas, entre las que figuran residentes y turistas, fueron evacuadas ayer, 30 de diciembre, del estado de Victoria (Australia) debido a las altas temperaturas y al viento, que complican las labores de extinción de los incendios forestales que asolan la región.

Según ha informado Antena3, los termómetros marcaban ayer los 40 grados en la capital de Victoria, Melbourne, aunque se espera el aumento de las temperaturas. A mediados de este mes, el país alcanzó máximas de 50 grados, una situación que, junto con el viento, aviva el fuego y dificulta el trabajo de los bomberos.

Las estimaciones apuntan que el peligro de incendio será extremo en siete de los nueve distritos de Victoria, aunque el frente cálido avanza hacia el estado de Nueva Gales del Sur. A lo largo de esta temporada de incendios, una de las más duras de la historia del país, el fuego ha arrasado cerca de 900 hogares y 3,48 hectáreas en Nueva Gales del Sur. 

De acuerdo con el diario ABC, esta oleada de incendios ha ocasionado la muerte de nueve personas, así como ha afectado a miles de animales y arrasado casi cinco millones de hectáreas, resultando destruidos miles de hogares, desde el pasado septiembre. Se estima que más de 1.000 koalas han perdido la vida por estos fuegos.

Boicot a los fuegos artificiales de Fin de Año

Más de 250.000 personas firmaron una petición para suspender el famoso espectáculo de fuegos artificiales de Sídney en Nochevieja, debido a los incendios forestales. Con esta movilización, los ciudadanos pretendían que el dinero destinado a los fuegos artificiales se invirtiera en la extinción del fuego. 

Sin embargo, el alcalde de Sídney, Clover Moore, desoyó esta petición y aseguró que el espectáculo saldría adelante, debido a que había sido planeado con 15 meses de anticipación y a que la mayoría del presupuesto ya se había gastado. "No podemos cancelar los fuegos artificiales y aunque pudiéramos, hacerlo tendría poco beneficio práctico", sentenció.