Aunque las previsiones turísticas para este año en la Costa Brava (Girona) son buenas con un aumento del 6%, se espera un posible descenso del turismo español debido al conflicto político de Cataluña, según ha publicado 'El País'.
Esto se intentará compensar con promociones específicas dirigidas al mercado francés, que representa un 25% de las visitas a la región, y recuperando a los más de 330.000 turistas rusos que se han perdido tras la situación socio-económica y política vivida en los últimos años en Rusia. Ramón Ramos, director general del Patronato de Turismo de Costa Brava, ha señalado que “los mercados del Este mostrarán un crecimiento de entre el 10% y el 20%” por lo que “la meta tanto de Girona como de Cataluña en general es recuperar las cifras de mercado ruso de años atrás”.
Los datos de 2017 fueron alentadores. Girona cerró 2017 con un aumento de turistas del 6,53% con un total de 5.675.233 a pesar de los brotes de turismofobia en la comunidad autónoma, el atentado en Barcelona y el 21D. A su vez, el aeropuerto de Girona creció por primera vez en cinco años y llegó a los 1,9 millones de pasajeros. Para 2018 se prevé llegar a 2,1 millones.
