La prensa británica ha advertido a los viajeros que visitan España sobre las protestas contra el turismo que se están llevando a cabo en el país. Los activistas han declarado que la oleada de acciones contra los visitantes podría continuar. 

El grupo anticapitalista Arran cargó contra un autobús lleno de británicos que visitaban el Camp Nou, en Barcelona, la semana pasada. Una de sus líderes, Laura Flores, ha declarado que: "El turismo está haciendo que las ciudades sean demasiado caras para vivir, ya que la gente alquila sus pisos a los turistas y los residentes se ven obligados a huir".

Cataluña recibió 18 millones de turistas en 2016, una cifra que la convierte en la región más popular para los turistas del país. Pero los problemas con los extranjeros no solo se dan en la comunidad catalana. En el País Vasco, el grupo Ernai ha organizado una marcha el 17 de agosto en la ciudad de San Sebastián en contra de la oleada de visitantes. También en Mallorca se han alzado voces en contra de la industria de los viajes. 

The Times publicó un artículo en portada el sábado bajo el título “Amenaza anarquista a los turistas”. En él, Noel Josephides, presidente de la ABTA culpa a los gobiernos locales por no haber tomado en serio las protestas. Además aconseja a los visitantes usar el sentido común, permanecer en alerta y no ir a sitios que impliquen riesgo.

Álvaro Nadal, ministro de Turismo de España, ha salido en defensa del sector y ha señalado que no se tolerarán ataques contra turistas. “Una minoría no puede arruinar las décadas de prestigio de nuestra industria turística”.