El Gobierno de Dinamarca ha anunciado su plan para aplicar un nuevo impuesto a los desplazamientos aéreos, con el que prevé recaudar unos 160 millones de euros para el año 2030. Según ha comunicado el ministro de Hacienda, Jepp Bruus, el Estado aplicará un gravamen de hasta 52 euros a todos aquellos pasajeros de vuelos internacionales con origen en el país nórdico, a excepción de los que hagan transbordo en los aeropuertos nacionales. Esta medida afectaría a los más de 1,1 millones de turistas daneses que visitan España de forma anual. 

Según informa el medio danés The Local, la tasa aérea en ciernes se aplicaría de forma progresiva, aumentando su importe en periodos trianuales. A partir de 2025, todos los pasajeros de vuelos con origen en Dinamarca tendrán que abonar una media de 9 euros extra durante tres años. Para el periodo 2028-2030, el impuesto ascendería a 11 euros y, a partir del año 30, la media se elevaría hasta los 13 euros.

La tasa gravará los vuelos según la distancia que recorran. Para el año 2030, a los pasajeros que viajen dentro de Europa se les aplicará una tasa de 8 euros y a los que escojan vuelos de media distancia, de 32 euros. Por su parte, los vuelos de largo radio tendrán un coste extra de 52 euros.