Las reservas para el verano en Reino Unido acumulan tres semanas de caídas consecutivas, según datos de la compañía analista de mercados Gfk.

Según informa Travel Weekly, en la semana del 2 al 9 de febrero, las reservas de vacaciones cayeron un 8% con respecto al mismo período de 2018.  Se suma así a los descensos del 10 y del 9% de las semanas anteriores.

No obstante, si se tiene en cuenta el ritmo de reserva desde el 1 de enero, el resultado es positivo, ya que hay un 3% más de reservas que en el pasado año. Los precios de venta promedio de verano de 2019 también aumentaron un 3% interanual.

Desde Gfk creen que el frenazo de las últimas semanas se debe en gran medida a las noticias sobre los efectos negativos del Brexit como la cancelación de vuelos o el aumento de las colas en el control de fronteras. Sin embargo las reservas para el mes de abril, fecha posterior al Brexit, son un 14% más altas que en 2018. No obstante,  se debe esencialmente a que la Semana Santa este año se celebra en abril, mientras que el pasado tuvo lugar en marzo.