El Ayuntamiento de Ibiza ha dado un paso decisivo hacia la modernización de su oferta turística con la declaración de zona turística en reconversión para los barrios de ses Figueretes y es Viver, una figura legal que permitirá ampliar, reformar o reconstruir hoteles y otros establecimientos con menos limitaciones urbanísticas. La medida busca impulsar la sostenibilidad, la calidad y la desestacionalización del destino.
La iniciativa, avalada por el conseller de Turismo, Jaume Bauzà, se ampara en el Decreto-ley 4/2025, que habilita a los municipios a aplicar un régimen urbanístico extraordinario en áreas con infraestructuras obsoletas o desequilibrios estructurales. Según ha explicado Bauzà en el Parlament, esta herramienta introduce una “flexibilidad urbanística moderada” y permite declarar de interés autonómico los proyectos de mejora y rehabilitación turística.
Entre las medidas más destacadas figura la posibilidad de incrementar hasta un 10% la superficie y ocupación de los edificios, ampliable hasta un 20% con autorización del pleno municipal. Además, se podrán legalizar reformas realizadas desde 2012 y acometer otro tipo de mejoras como rehabilitación de fachadas, instalación de ascensores, mejoras energéticas o reducción del ruido.
✔️Avui posam en valor el decret llei 4/2025, un decret que permet que cada Consell Insular pugui declarar l’existència de zones turístiques de reconversió, saturades, saturades i de reconversió. pic.twitter.com/m3o3J6nwMK
— Conselleria Turisme, Cultura i Esports (@turismeGOIB) November 11, 2025
El alcalde de Ibiza, Rafael Triguero, ha subrayado que el reconocimiento como zona en reconversión “abrirá la puerta a nuevas líneas de ayudas públicas” y fomentará la inversión privada. También se permitirá reordenar volúmenes, aprovechar el subsuelo y agrupar parcelas, siempre sin aumentar el número de plazas turísticas. Los establecimientos que amplíen su superficie deberán destinar un 5% del presupuesto de obra a mejoras del entorno.
Con esta medida, el consistorio busca revitalizar dos barrios costeros degradados y reposicionar la zona como un espacio atractivo durante todo el año. La iniciativa ofrece un triple beneficio: facilitar la modernización del sector, generar recursos para la mejora urbana y elevar la calidad de vida y de la experiencia turística en el litoral ibicenco.




