Vueling, la aerolínea de bajo coste con sede en el aeropuerto de Barcelona-El Prat, se ha visto obligada a disculparse con el futbolista del F.C. Barcelona, Lionel Messi.

La polémica surgió esta semana cuando el presidente de la compañía, Javier Sánchez Prieto, declaró públicamente que se debería “abrir un debate” sobre las limitaciones de las pistas del aeropuerto de Barcelona. A lo que el directivo añadió, a modo de chascarrillo, que “no se puede pasar por donde vive Leo Messi”.

Tal y como se hace eco el diario El País, los aviones que despegan del Aeropuerto de Barcelona-El Prat tienen sus operaciones encorsetadas, ya que no pueden pasar por encima de la población más cercana a las pistas, Gavá de Mar. El motivo es que en 2007 los vecinos de Gavá de Mar, así como los de Castelldefells, población también cercana al aeropuerto y en donde reside el deportista, se quejaron de los ruidos y las incomodidades que suponía que los aviones sobrevolaran sus casas. Desde entonces, los despegues de las aeronaves están condicionados por estas restricciones. Un procedimiento que no gusta a Sánchez Prieto ya que, afirma, “reducen la capacidad de funcionamiento de las pistas”.

Sin embargo, como todo lo que tiene que ver con el astro del fútbol genera un gran impacto mediático, la aerolínea ha emitido un comunicado “lamentando el malentendido”y asegura que su presidente “nunca quiso involucrar al jugador de fútbol en ninguna polémica”.

 

Lo que subyace tras la controversia es la disconformidad de Vueling con el plan del Ministerio de Fomento sobre cómo ampliar el Aeropuerto del Prat. Según el documento, presentado el pasado mes, desde el Gobierno se pretende que el Aeropuerto de Girona sea “la cuarta pista” de Barcelona-El Prat. Una medida que no gusta a la compañía, ya que consideran que “no es eficiente” hacer al pasajero “viajar una hora hasta Girona”.