Un estafador parece haber encontrado la manera perfecta de fastidiar el verano tanto a turistas como a los residentes de un edificio de Palma (Mallorca). A través de varias plataformas digitales de alquiler vacacional, el ciberdelincuente ha anunciado (falsamente) varias de las viviendas del inmueble. Para sorpresa de los visitantes, una vez llegan a la casa, se encuentran con que han sido víctimas de una estafa.

Los vecinos del edificio reciben constantes ‘visitas’ en su vivienda. Los turistas, la mayoría de ellos extranjeros, llegan allí, cargados con sus maletas y convencidos de que han alquilado una casa para pasar allí sus vacaciones. En dicha situación, los residentes solo pueden explicarles que han sido víctima de una estafa y recomendarles que llamen a la policía y que se alojen en un albergue cercano.

No obstante, algo cansado del problema, el presidente de la comunidad ha colocado carteles en las diferentes puertas de acceso al edificio. En ellos puede leerse, tanto en inglés como en español: “En este edificio no hay ningún piso de alquiler vacacional. Si ha alquilado uno llame a la policía a uno de estos números: 091 o 112. Gracias”.

Y es que los vecinos, aunque se solidarizan con las víctimas de la estafa, ya se han empezado a hartar de algunas situaciones vividas: “Otro día tuvo que venir la policía por la tensión que se originó con otro grupo. Es increíble lo que nos está pasando”, ha explicado a Diario de Mallorca Toni López, presidente de la comunidad.