El sector del transporte en Málaga vive en una carrera contrarreloj para poder dar servicio a la alta demanda turística previta para este verano. En especial, las empresas de autobuses viven momentos de desesperación por la carencia de hasta 300 conductores en toda la provincia.

Según datos de la Asociación Provincial de Empresas de Transporte y Agencias de Málaga (Apetam) recogidos por Málaga Hoy, actualmente en la provincia hay unas 150 empresas de transporte de viajeros en las que trabajan más de 2.000 profesionales. Sin embargo, estas cifras no son suficientes para dar cobertura a la demanda de transporte por carretera.

Problemas


Tal y como ha relatado el presidente de Apetam, Antonio Vázquez, la escasez de conductores se debe, principalmente, al largo periodo de tiempo y los elevados costes que debe asumir un futuro chófer a la hora de obtener el Certificado de Aptitud Profesional (CAP), formación obligatoria exigida a los conductores que quieran tener el documento para conducir vehículos pesados de las categorías C y D.

Otro inconveniente que se suma a la problemática actual del sector es que cada vez son menos los jóvenes que están interesados en la profesión. “En este trabajo muchas veces hay que trabajar los fines de semana y la gente joven no quiere eso y busca otros trabajos”, asegura Vázquez.