Que Marbella (Málaga) es un destino muy cotizado es algo indudable. Turistas de todos los perfiles deciden pasar su verano en esta localidad de la Costa del Sol, entre ellos los políticos. Sin duda, ejercen de imán para animar a otros viajeros a visitar el destino, pero también tienen efectos colaterales negativos.

De una de las principales consecuencias negativas se hace eco El Confidencial, y es que este verano, el municipio marbellí solo tiene disponibles la mitad de coches de la Brigada de Seguridad Ciudadana en Marbella, ya que el resto de las unidades están dedicadas exclusivamente a la escolta de cargos políticos como los expresidentes del Gobierno, Felipe González y José María Aznar; el exministro, Ángel Acebes, el exsecretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez; y el actual director del Gabinete del ministro del Interior, Rafael Pérez.

Durante el mes de agosto, sólo 2 de los 5 coches Z (camuflados) estaban disponibles para el resto de ciudadanos. Un delegado del sindicato denuncia la situación: “Los puntos fijos de vigilancia en casa de los dos expresidentes que tenemos que mantener a diario absorben toda nuestra infraestructura”. 

Y es que los dispositivos restantes tienen que garantizar la seguridad de una población que se dispara a los 500.000 habitantes en verano.