El Tribunal Superior de Justicia de Islas Baleares (TSJIB) ha admitido a trámite la demanda interpuesta por la Associació de Restauradors de Mallorca (AREMA) y la Federació de la Petita i Mitjana Empresa de Mallorca (PIMEM) contra las restricciones de la restauración impuestas en el Archipiélago y que el Gobierno regional ha ampliado hasta el 28 de febrero.

Ambas asociaciones esperan que el tribunal dictamine una suspensión cautelar contra las medidas restrictivas, de la misma manera que lo ha hecho el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV). Además, proponen una reapertura, tanto del interior como del exterior, con un aforo del 50 y 75%, respectivamente.

Asimismo, reclaman que el juzgado se pronuncie de manera urgente “sabiendo la grave situación de la restauración en las islas”, añaden en un comunicado. Según las asociaciones, “cada día que pasa sin el pronunciamiento oficial del TSJIB cierran en Mallorca 50 bares o restaurantes, que dejarán fuera a centenares de trabajadores”.

Antecedentes

Tal y como recuerda La Vanguardia, la semana pasada, el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) suspendió de manera cautelar el cierre de la hostelería, permitiendo su reapertura en todos los municipios, incluidos los que se encontraban en “alerta roja” por alta incidencia de casos de coronavirus. La sentencia de los magistrados ha sentado precedentes en la Justicia nacional.