Ibiza corre el riesgo de convertirse en Tailandia con el turismo sexual”, aseveró Rosa Hermoso, que lleva más de tres décadas trabajando por la abolición de la prostitución, en una entrevista concedida al Diario de Ibiza. Hermoso aseguró que a la isla balear “le queda poco” para convertirse en el país asiático, lo que “no es bueno ni económica ni social ni culturalmente”.

Rosa Hermoso participó como ponente en la primera sesión de las jornadas de Prostitución y Salud celebradas en la Universidad de les Illes Balears (UIB) y organizadas por Metges del Món, el Consell de Eivissa y el Área de Salud Pitiusa.

Hermoso  indicó que Ibiza es una zona de turismo sexual, tras la apreciación del entrevistador de que la prostitución parece formar parte del pack de turismo de lujo en la isla. En este sentido, incidió en que no se trata de sexo, sino de “explotación sexual”. “Las mujeres no tenemos un precio. Además, nos sentimos seguras si no estamos en situación de prostitución y no es cierto”, considera la experta, haciendo alusión a los últimos casos de agresión sexual en España, perpetrados por grupos de individuos conocidos como ‘manadas’.

Hermoso también reparó en que los consumistas de prostitución “están acostumbrados a ver en la tele o en carteles o guías turísticas a mujeres en posturas muy sexualizadas”. Por ello, normalizar los anuncios de hoteles, donde aparecen mujeres semidesnudas, es un hándicap en la lucha contra la prostitución.

Para evitarlo, las mujeres deben hacerse notar, según la ponente, “debería haber una manifestación de mujeres en las puertas del hotel diciendo no a la violencia sexual contra las mujeres”. “Lo que nos queda, además de la denuncia, es el activismo, salir a la calle, moverse en redes. Cada ciudad debe empoderarse para luchar y defendernos. Todas somos una”, recriminó Hermoso.

Por último, la experta recalcó que las mujeres tienen los “mismos derechos que los hombres”, así como que la “prostitución es un atentado contra los derechos humanos de las mujeres y los gobiernos lo están permitiendo”. Al mismo tiempo, presentó una ordenanza de Sevilla que prohíbe la prostitución, con el fin de que se estudie su adaptación a la isla balear. “Ibiza lo necesita”, sentenció.