La práctica de sexo en es Cavallet (Ibiza) está perjudicando gravemente al sistema dunar de esta zona, que forma parte del Parque Natural de ses Salines. Tal es así, que geólogos y biólogos han alertado sobre los daños irreparables que producen los encuentros sexuales en el enclave, que se considera una meca gay.

Según ha informado Diario de Ibiza, el paraje se utiliza, principalmente, para practicar el cruising (encuentros sexuales furtivos entre desconocidos, principalmente entre homosexuales). Lo más habitual es pasear por esta zona desnudo en busca de un compañero de aventuras, obviando el riesgo que ello conlleva para el ecosistema.

El biólogo y presidente de la organización no gubernamental GEN, Joan Carles Palerm, indica que el libre acceso a esta zona dunar “provoca el descabalgamiento de las dunas y que se quiebren sus estructuras”. Lo cierto, es que el sistema que las mantiene en muy complejo y cualquier actuación afecta notablemente al paraje.

“En el litoral siempre sopla un viento llamado embat, que va de mar hacia tierra. En primera línea hay pequeñas plantas, como el molinet, que son capaces de resistir ese viento y el consiguiente movimiento de tierra que ocasiona en el suelo. Son especies que viven muy poco tiempo, pero su corta existencia es vital para el sistema dunar, pues cuando el embat alcanza las dunas, se eleva gracias a ellas. Eso permite que se asienten allí otras plantas, como el lotus o el barrón (Ammophila arenaria)”, explica el biólogo.

Sin embargo, los practicantes del cruising, que se saltan los cordones que prohíben el paso para acceder a este enclave, “pisotean y rompen la primera estructura defensiva formada por la vegetación en línea, la de los molinets”, puntualiza Palerm. Al mismo tiempo, si se destruye esta barrera, “el viento entra con fuerza y arranca, poco a poco, el suelo. Aparecen entonces las cárcavas, grietas en el terreno en las que se ven aflorar las raíces de las sabinas”.

El sexo en otra isla española

El municipio turístico de Maspalomas, ubicado en el sur de la isla de Gran Canaria, fue señalado recientemente como el epicentro del turismo sexual en España. Lo cierto, es que esta localidad también alberga un sistema dunar, el Parque Natural de las Dunas de Maspalomas,un conjunto dunar de elevado valor natural donde tanto heteros como homosexuales tienen sexo grupal en público.