El presidente de la Asociación de Viviendas Turísticas (AVAT), Roberto San Esteban cifra en 3.996 el número de apartamentos que alojaron viajeros de manera ilegal en Ibiza en agosto. 

San Esteban apunta, además, que durante ese mes llegaron a la isla entre 45.000 y 50.000 personas que no pernoctaron en hoteles ni en oferta reglada, con lo cual, restando a los que se quedaron en casa de familiares y amigos, la cifras hablarían de unos 35.000 visitantes que escogieron la oferta alegal o ilegal.

El presidente de la AVAT reveló estos datos durante la presentación del III Congreso de Viviendas Turísticas Vacacionales de Ibiza, que se celebrará los próximos días 23 y 24 de octubre, con la participación de dos de las plataformas de comercialización de apartamentos turísticos más potentes: Airbnb y Homeaway.

Booking avanzó recientemente que no publicitará viviendas sin número de registro. La retirada del mercado de esta oferta ilegal o alegal va a tener, según la AVAT, “consecuencias positivas para los propietarios legalizados, para los comercializadores de viviendas turísticas legales, ya que tendrán un volumen más grande de clientes que atender, y para los trabajadores que contarán con un producto para poder alquilar y venir a la isla de una manera socialmente razonable, que ahora mismo no tenían”, añade San Esteban.

Suscripción

El responsable de la AVAT asegura que, “a medio y largo plazo la intensidad de público que ha habido en Balears disminuirá un poco porque algunos destinos como Grecia, Túnez o Turquía recuperarán un poquito lo que han perdido y, así, se estabilizarán un tanto los porcentajes que tendrían hoteles y viviendas turísticas”.

Por su parte, el director insular de Turismo, Vicent Torres, recuerda que en Ibiza hay unas 25.000 plazas de vivienda turística vacacional legal, y recalca que el cambio en la normativa ha modificado un poco el escenario general porque, por primera vez, estas plazas se consideran turísticas.

Torres destaca que “parte de la culpa” de los problemas de vivienda en la isla la tienen las plataformas ‘online’ de comercialización de viviendas residenciales como pisos de vacaciones porque, “hoy por hoy, esas viviendas no están regladas”.

Actualmente en Ibiza, de las 4.747 viviendas turísticas, 2.000 todavía carecen de la licencia de la actividad en este sector.