El diario The New York Times ha publicado una investigación sobre el origen de los primeros habitantes de Canarias, comunidad autónoma que define como “un centro turístico, un archipiélago volcánico con palmeras y playas de color azul”.

El periódico se hace eco del debate existente entre los investigadores, sobre el origen de los indígenas canarios. Mientras que algunas corrientes indican que los aborígenes navegaron a las islas hace más de mil años, otras aseguran que fueron llevados allí por los antiguos navegantes mediterráneos.

A este respecto, The New York Times asegura: "Cada vez más, las pruebas apuntan a un viaje intencional". Y es que, el diario se basa en una investigación liderada por Rosa Fregel, genetista de poblaciones de la Universidad de La Laguna (Tenerife), que gira en torno al estudio del ADN mitocondrial, que se hereda de las madres y ofrece pistas sobre las antiguas migraciones humanas. 

Se trata del primer estudio de ADN antiguo que incluye restos arqueológicos de las siete islas canarias. De este se deduce, que los primeros habitantes de Canarias proceden del norte de África, quienes pudieron llegar al archipiélago en el año 100 d.C. y asentarse en él en el año 1.000 d.C. 

museo canario

Restos óseos de aborígenes canarios en el Museo Canario (Gran Canaria) | Foto: Canarias Noticias

Este hallazgo confirmaría los estudios arqueológicos, antropológicos y genéticos previos, que señalaban que los primeros habitantes eran bereberes del norte de África, una etnia milenaria propia de esta región, que en la actualidad está presente en Marruecos, Argelia, Túnez, Libia y parte del Sáhara.  

Las dudas sobre el origen de los primeros habitantes canarios, surgieron a raíz de unos registros realizados por los europeos del siglo XV, que aseguraban que los canarios nativos no sabían navegar. Por tanto, ¿estos individuos fueron traídos por romanos o cartagineses o llegaron a las Islas por sus propios medios?

En este sentido, Fregel aclaró que, pese a que su estudio no muestra cómo llegaron los aborígenes a Canarias, sí proporciona más evidencias de que el movimiento migratorio que se produjo fue grande y realizado por personas que tenían los recursos para sobrevivir en las Islas.