El aeropuerto de Ibiza prevé cerrar el año con un crecimiento del 6% en llegadas y salidas, lo que elevaría las cifras a los 8 millones de pasajeros.

Roberto Llamas, director de la terminal aérea, ha destacado las subidas en la actividad durante los meses de inicio y final de temporada: abril, mayo y octubre. “Estamos cumpliendo uno de los compromisos del Comité de Rutas: desestacionalizar”, afirma.

Contabilizando llegadas y salidas, de enero a septiembre de este año, la cifra se sitúa en los 6.838.469 pasajeros. Según las previsiones, en diciembre el ejercicio terminaría con una actividad de 7.798.181, más los incrementos que podrían producirse en estos últimos meses.

AENA, por su parte, considera que los resultados son “consecuencia de la promoción que se lleva a cabo de los productos turísticos fuera de temporada, por parte de las instituciones locales”.

En relación con el comportamiento de los mercados emisores de viajeros, Llamas destaca el descenso del alemán (5%). Sin embargo, el segmento nacional experimentó un crecimiento del 5%, el británico del 10% y del italiano (4%).

El mercado holandés ha experimentado un ‘boom’ con un aumento del 21%, y se convierte así en el cuarto para el aeropuerto ibicenco.