Con el objetivo de abrir a los turistas las puertas de las localidades despobladas del Pirineo, especialmente a extranjeros, la Asociación de Alojamientos con Carácter de Aragón se ha presentado como unión empresarial dedicada a la comercialización de hoteles, restaurantes y pequeñas empresas.

Anabel Costas, presidenta de esta unión, ha explicado que reciben a muchos holandeses, belgas y británicos. “Durante septiembre, por ejemplo, hemos tenido grupos de coches clásicos ingleses, de ciclistas australianos, moteros de Canadá, Estados Unidos, Brasil, Colombia y Venezuela”, informó la empresaria.

Se trata de pequeños establecimientos que pretenden mantenerse abiertos todo el año y, de esa manera, romper con la estacionalidad que se asocia a este sector. Uno de los mercados emergentes es China, “donde hemos hecho una intentona importante de penetración junto al gobierno aragonés, pero los resultados aún están por ver”, puntualizó Costas.

Pueblos como Tamacastilla de Tena, con 150 habitantes, apuestan fuertemente por esta forma de hacerse un lugar en el sector turístico. Juan Ignacio Pérez, director del establecimiento El Privilegio de Tena, comenta que a pesar de los escasos pobladores de la localidad, este alojamiento funciona. Hay otro como Viñas de Lárrede que saca adelante su negocio en un pueblo que no llega a la veintena de vecinos, y cuya puesta en marcha ha supuesto una inversión de tres millones de euros.

La Asociación de Alojamientos de Aragón, cuenta además entre sus socios con La Posada del Pirineo, en la población del mismo nombre, Hotel Spa Agua de los Mallos (Murillo de Gállego), además de la Bodega Edra, el parque faunístico Lacuniacha, Biescas Aventura y la firma de elaboración de pacharán artesano Partcharán.