Tras finalizar el verano toca a los principales destinos de esta temporada, como Baleares, hacer balance y analizar los puntos fuertes y los aspectos a mejorar. En este sentido, el conseller balear de Modelo Económico, Turismo y Trabajo, Iago Negueruela, ha admitido que, aunque este año “ha estado mucho más controlado, cuesta acabar con el turismo de excesos o de borrachera”.

El conseller ha asegurado que acabar con este tipo de turismo en algunas zonas de Baleares se ha convertido en uno de sus “retos principales” para las próximas temporadas. En palabras de Negueruela, erradicar el turismo de borrachera mejorará la calidad del destino.

“El esfuerzo y la apuesta es evitar el turismo de excesos en esas zonas demarcadas por la normativa autonómica, que es específica para acabar con ese tipo de turismo y que el año que viene cobrará plenamente vigencia una vez pasado el Covid”, ha advertido en una entrevista concedida a Europa Press.


 

Cabe recordar que, a principios de 2020, el Govern balear aprobó un decreto específico contra el turismo de excesos. “Es una norma bastante dura”, ha insistido el conseller.

Asimismo, Negueruela ha valorado positivamente el esfuerzo del sector privado para la reconversión del destino. Aunque el conseller también considera que las ayudas procedentes de los fondos europeos también deben ir destinadas a realizar las reformas necesarias para mejorar la calidad del destino, sobre todo en determinadas zonas de Palma (Mallorca) e Ibiza.