El grupo hotelero Husa ha entrado en fase de liquidación tras no cumplir con los compromisos adquiridos con sus acreedores en 2015.

En 2014, la compañía arrastraba una deuda de 250 millones de euros y se vio obligada a declarar el concurso de acreedores. Un año después, consiguió superar la situación tras acordar un plan de recuperación con los acreedores que suponía:

  • La cesión de activos por valor de 80 millones de euros a la banca
  • La cesión de activos por de 25 millones a las administraciones públicas.
  • La quita del 95% sobre 90 millones de euros en créditos ordinarios.
  • El pago del 5% restante, así como otras cantidades adeudadas.

No obstante, llegada el 18 de febrero —cinco años después de que el convenio del concurso de acreedores fuese firme— la compañía no ha podido hacer frente al pago de cerca de 10 millones de euros que se le reclamaba. Aduce que ya no le quedan activos propios, ni tampoco hoteles bajo explotación, así como que sus cuentas han sido embargadas por Hacienda y la Seguridad Social.
 

Hotel Husa Imperial Tarraco. Foto de Bernard Gagnon, CC BY SA 3.0 via (Wikimedia Commons)

Antiguo Hotel Husa Imperial Tarraco, ahora de H10 | Foto de Bernard Gagnon, CC BY SA 3.0 via (Wikimedia Commons)

Ahora, el juzgado mercantil 3 de Barcelona se encargará de la disolución de la matriz Hostelería Unida y las filiales Hostelería Unida Dos y Hoteles Jagoe. Procederá a la venta ordenada de activos, en caso de que los haya, y al reparto de los réditos entre los acreedores. Cabe destacar que la liquidación supone que las quitas pactadas desaparecen y la deuda de Husa vuelve a dispararse a los 200 millones.

Husa fue fundada en 1940 por Josep Gaspart, que se apartó de la misma solo cuatro años después. Fue su nieto Joan Gaspart quien recompró la marca en 1974. En su momento pico, llegó a alcanzar los 160 hoteles (12.000 habitaciones), aunque la mayoría de ellos bajo contratos de alquiler.