Tras una fase de democratización, parece que el esquí está volviendo a sus orígenes y se está convirtiendo en una actividad para "ricos" si se atiende a la escalada de precios de los forfaits, término que define los abonos que dan acceso a los servicios de las estaciones. En uno de los destinos europeos más asequibles, como Italia, los precios se han disparado un 40% desde 2021, según recoge Euronews.

En opinión de la asociación de consumidores Assoutenti, este aumento amenaza con convertir el esquí en un deporte exclusivo para las rentas más altas, una advertencia respaldada por datos de Federalberghi que indican que cerca de cuatro millones de italianos han dejado de practicar deportes de invierno, en gran parte por motivos económicos.

Ejemplos de la escalada de precios se encuentran en Dolomiti Superski, donde el forfait diario ha pasado de 67 a 86 euros, o en Livigno, con un incremento del 38% de 52 a 72 euros. El presidente de Assoutenti, Gabriele Melluso, ha calificado estas tarifas como "totalmente injustificadas e inaceptables" y rebate los argumentos de los operadores de las estaciones, que afirman haberse visto obligado a subir precios para hacer frente a los sobrecostes energéticos y de mantenimiento. Melluso argumenta que las tarifas energéticas han "vuelto a la normalidad" y la inflación "está bajo control".

Por su parte, la Autoridad de la Competencia y el Mercado (Agcm) abrió el pasado julio una investigación contra la Federconsorzi Dolomiti Superski (que agrupa a 12 estaciones en Los Dolomitas) por un presunto "acuerdo anticompetitivo" en la fijación de tarifas.

El turismo de montaña, en caída libre


Los efectos de las subidas ya se están sintiendo en una reducción de la demanda. De hecho, entre 2023 y 202, las estancias en estaciones de esquí cayeron de los 12 a los 8,2 millones. La facturación también se ha desplomado un 39%: pasando de los 9.600 a 5.800 millones de euros.

El impacto económico es considerable. En 2023, el turismo de montaña generó 9.600 millones de euros, impulsado aún por la recuperación pospandemia. Pero en 2025, la cifra se redujo a 5.800 millones, una caída del 39% en solo dos años.

A pesar de los fuertes incrementos en Italia, el país sigue siendo, por ahora, más asequible que destinos competidores como Suiza o Austria, donde los forfaits diarios superan habitualmente los 100 y 80 euros, respectivamente, y donde también se esperan nuevas subidas.