La Junta de Andalucía ha frenado temporalmente el desarrollo en Barbate (Cádiz) del Següesal Barbate, un proyecto que engloba tres hoteles de lujo, más de seiscientos apartamentos turísticos, cuatrocientas cincuenta viviendas nuevas y un campo de golf, estando ubicados todos estos elementos en un terreno de 4.672.000 metros cuadrados, extensión que la convertiría en la mayor urbanización turística de Andalucía.

La promotora de la construcción ha recibido la calificación "desfavorable" en la Declaración Ambiental Estratégica, un informe en el que se evalúa la integración de los aspectos ambientales en la propuesta final del plan presentado por el complejo turístico. Así, se rechaza la aprobación del proyecto, aunque la empresa puede volver a presentar un nuevo plan basándose en las últimas indicaciones.

Paradójicamente, Bogaris Barbate SL ha destacado con cierto optimismo varios elementos de la declaración institucional, ya que defienden que confirma la viabilidad de la gestión de los recursos hídricos por parte de las diferentes instalaciones, especialmente la proyectada para el campo de golf con un riego en el que se utilizarían exclusivamente aguas reutilizadas de la depuradora de Vejer de la Frontera (Cádiz).

Asimismo, aclaran que están satisfechos con la desestimación de las alegaciones de Ecologistas en Acción en relación con la apertura de un proceso de información pública, elemento que permitiría que cualquier persona u organismo presentara alegaciones al proyecto. La confederación ecologista, sin embargo, ha emitido un entusiasta comunicado en el que celebran la paralización de la 'macrourbanización', evitando así "efectos irreversibles sobre los espacios naturales, la biodiversidad, los recursos naturales y el paisaje". Los activistas hablan de que el plan de desarrollo de Següesal Barbate, afectaría a 13 Hábitats de Interés Comunitario, minando la presencia de fauna y flora protegida. 

Apunta el medio especializado Golf Industria que, a lo largo de las próximas semanas, los promotores turísticos analizarán la viabilidad futura del proyecto y podrán presentar las subsanaciones que sean oportunas. Desde Bogaris Barbate SL lamentan este último frenazo al proyecto, que acumula una tramitación administrativa de más de diez años a sus espaldas.