El pasado 1 de julio, Chequia asumió la presidencia del Consejo Europeo —institución en la que están representados los 27 jefes de Estado o de Gobierno de los países miembros— y, durante su mandato de seis meses, promete recortes en lo que respecta a los derechos de los pasajeros.

Según informa Spiegel, la delegación checa tiene intención de aumentar a cinco horas el tiempo de demora que daría derecho a los pasajeros para reclamar una compensación aerolíneas. Actualmente, tienen que indemnizar a los clientes que llegan a su destino final con más de tres horas de retraso con respecto a la hora originalmente prevista, con cuantías que varían desde los 250 a los 600 euros dependiendo de la distancia entre el origen y el destino.

De igual manera, también consideran introducir en la lista de circunstancias extraordinarias —aquellas que eximen a la aerolínea de tener que compensar al cliente— la categoría "deficiencias inesperadas en el control del tránsito aéreo", un concepto que ya ha sido tachado por las asociaciones de consumo como “vago” y poco rastreable por los pasajeros.

Hasta ahora, las excepciones contempladas eran:

  • Inestabilidad política en el país de Origen/Destino
  • Condiciones meteorológicas incompatibles con la realización del vuelo.
  • Riesgos para la seguridad.
  • Deficiencias inesperadas en la seguridad del vuelo.
  • Huelgas que afecten a las operaciones de un transportista aéreo encargado de efectuar un vuelo (Las huelgas del personal propio de la compañía no pueden considerarse como circunstancias extraordinarias).

Desde la asociación alemana Verbraucherzentrale Bundesverband consideran que esto supondría un retroceso en los derechos de los clientes. “No habría ningún incentivo para que las aerolíneas ofrezcan un mejor servicio”, aseveran.