El Gobierno de España pretende que todos los trabajadores subcontratados estén cubiertos por los convenios propios de su sector. Este cambio se aplicaría al artículo 42 del Estatuto de los Trabajadores y buscaría garantizar “la igualdad en las condiciones laborales”.

Este paso llega tras la polémica generada por las condiciones laborales denunciadas por las camareras de piso, apodadas Las Kellys, que en muchas ocasiones no estaban amparadas por el convenio de su sector, ciñéndose al de la empresa de servicios que las contrataban.

Según explica OK Diario, esta medida podría suponer un golpe para la competitividad española, sin embargo, el impacto no será tan duro para el turismo. Según datos de Comisiones Obreras, el 23 de los 50 convenios hosteleros de España ya cuentan con cláusulas para asegurar que la subcontratada aplica las mismas condiciones laborales a los empleados externalizados, aunque tres de ellos están caducados (Valencia, Castellón y Terue)l. Estas cláusulas cubren al 69,7% de los 1,1 millones de asalariados de la hostelería y se eleva al 76,4% si se tienen en cuenta los acuerdos vencidos.

Otra cuestión es cómo afectará a otros servicios como los controles de seguridad en los aeropuertos y restos de infraestructuras críticas.