Donald Trump ha emitido una nueva Orden Ejecutiva de restricción de entrada en EE.UU. después de que un juez ordenara la suspensión de la primera, que solo estuvo ocho días en vigor. En esta ocasión el político ha tenido que ser más moderado. 

Este nuevo proyecto mantiene la cancelación de visados durante 90 días a partir del 16 de marzo a los ciudadanos de varios países musulmanes por considerarlos “de alto peligro en materia de terrorismo”  y suspende la emisión de visados de refugiado durante 120 días. Después de este tiempo, la Orden será revisada y se decidirá si se mantiene. 

En este nuevo decreto Siria, Libia, Yemen, Somalia, Irán y Sudán siguen siendo los señalados e Irak cae de la lista negra después de mejorar su colaboración antiterrorista con el país norteamericano. Además, en relación con todas estas regiones desaparece la discriminación por religión. En la anterior orden, se daba preferencia a las personas que no fueran musulmanas. En cuanto a los refugiados, la cifra de aceptados en el país se reducirá de 110.000 a 50.000 cada año. 

Otro de los cambios notables es que la medida no se aplicará a aquellos que sean residentes legales en EE.UU. o tengan un visado expedido antes del 27 de enero. 

Por ahora, sigue sin haber noticias sobre otros asuntos como la renegociación del tratado de libre comercio con Canadá y México y el muro con este último.